La puerta de entrada de esta reflexión es la Fe, en medio de las jornadas para delegados para la Pastoral de la Salud y del Año de la Fe, no podemos si no que plantearnos ¿qué motivaciones necesitamos alimentar?; ¿qué estructuras hemos de fortalecer, mejorar o cambiar?; ¿qué métodos de trabajo necesitamos incorporar, para ofrecer una respuesta más evangélica a los afligidos por la enfermedad y a los conflictos en el campo de la salud, en el momento actual?