Septiembre, octubre, noviembre y diciembre – 04 | 2020
En un mundo fragmentado y polarizado, el papa Francisco propone un estilo comunicativo de proximidad. A los profesionales, les pide practicar un periodismo de paz, responsable y veraz, orientado a la resolución de confl ictos.
El proceso de comunicar implica que los pacientes puedan ser capaces de formular todas las preguntas que les permitan clarifi car las dudas sobre su salud. Bajo este principio, el autor nos orienta en la importancia que tiene la comunicación entre médicos y pacientes.
La comunicación juega un papel importante en el derecho a la salud, puesto que es un instrumento clave para facilitar que las personas dispongan de información adecuada para un correcto manejo de su salud.
La múltiple oferta de vías comunicativas y fuentes de información favorece el aumento de la desinformación. La ciudadanía se enfrenta al difícil cometido de evaluar la fi abilidad y validez del ingente volumen de información que circula por Internet, a lo que se añade la aparición de noticias falsas o fakes news.
La pandemia del SARS-CoV-2 ha originado no solo la mayor avalancha de estudios científicos de la historia sino también durante varios meses ha eclipsado cualquier otro asunto informativo en medios de comunicación y redes sociales. El miedo, la incertidumbre y la impotencia hipnotizaron el interés mundial.
Nuestro modo de comunicar puede ser asertivo, compasivo, incisivo, amoroso, violento, constructivo… Son matices todos ellos que se ponen en juego en función del tipo de relación que hemos establecido y de la finalidad que nos proponemos alcanzar.
El autor nos sitúa en el término infl uencer que hace referencia a personajes de muy diversa condición que acumulan grandes cantidades de seguidores de su actividad, por lo general muy intensa, en redes sociales.
01 – El magisterio de la comunicación en salud | 02 – Una década conectando con familias y profesionales en las redes sociales | 03 – Las relaciones interpersonales en el libro de Rut | 04 – Momentos de comunicación: gracias a Dios y a los enfermos